Los drones Titan Falcon impresos en 3D llegan a Ucrania para dar un giro a la guerra
Ya hace casi dos años desde que la guerra en Ucrania dió comienzo. En sus inicios, era un tema comentado por todos los medios de comunicación, pero con el tiempo, parece que ha ido cayendo en el olvido para muchos. La guerra continúa y el ejército ucraniano resiste tras un largo periodo de enfrentamientos con el ejército ruso. Uno de los principales problemas del ejército ucraniano es la escasez de medios, las tropas se están quedando sin armas ni munición. Como ya hemos contado anteriormente, una forma barata y eficaz de proporcionar recursos al ejército ucraniano, es gracias a las tecnologías de impresión 3D, que son capaces de fabricar grandes cantidades en muy poco tiempo a un bajo coste, y así lo han vuelto a hacer con estos drones Titan Falcon.
La impresión 3D está revolucionando la industria de la defensa. Se están logrando numerosos avances en este campo y varios de ellos se han visto reflejados en esta guerra. Gracias a la colaboración de una ONG estadounidense-ucraniana, la alemana Donaustahl GmbH y Titan Dynamics Inc, se ha podido proporcionar un pedido de drones a Ucrania para tratar de dar un giro a este conflicto. Se trata de tres drones Titan Falcon que han sido entregados a las Fuerzas Armadas de Ucrania. Lo poco que sabemos es que ya han sido enviados a algunas misiones y sometidos a pruebas para comprobar de lo que son capaces.
Estos drones impresos en 3D son sorprendentes en múltiples aspectos. Un claro ejemplo es su autonomía que permite al Titan Falcon estar en el aire hasta 6 horas de manera contínua. Otro aspecto a destacar a su amplio rango de manejo de hasta 400 kilómetros, lo que combinado con su impresionante tiempo de vuelo le otorga la capacidad de recorrer largas distancias. Además, tiene una cámara de vigilancia que ofrece imagen en directo en primera persona, la cual se puede equipar con distintos objetivos para mejorar su alcance. Esto y mucho más, hacen de este dron la aeronave perfecta para labores de vigilancia en el campo de batalla.
En cuanto a las tecnologías de impresión 3D utilizadas en su fabricación, por lo que sabemos siguen siendo un misterio. Pero lo que sí sabemos es que la capacidad de estas tecnologías para producir diseños complejos de forma rápida y rentable está cambiando las reglas del juego en este campo, ofreciendo nuevas posibilidades de innovación y despliegue rápidos. La empresa Titan Dynamics Inc. está liderando esta iniciativa con sus drones Titan Falcon. Se trata de una empresa especializada en el desarrollo y fabricación de aeronaves clase VTOL (aeronaves de ala fija y de despegue vertical). Su objetivo es mejorar en múltiples aspectos los UAV (vehículos aéreos no tripulados). De manera que se centran en mejorar su eficacia, su utilidad y aumentar su alcance, siempre reduciendo los costes de fabricación.
Hace pocas semanas, la empresa británica London Defense R&D desarrolló un sistema antidrones impreso en 3D, el LD-80. Su finalidad es hacer frente el creciente número de drones. Este sistema, construido con MJF (multi jet fusion), ha supuesto un importante cambio en el mercado mundial de armamento, dado que ahora tanto particulares como instituciones pueden fabricar sus propios drones sin necesidad de comprar el producto final.
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*Créditos de las imágenes: Titan Dynamics